martes, 4 de agosto de 2020

CARTA A MILLER


Creo que la segunda cosa más dolorosa después de perder a un ser querido, es perder a tú mascota... tu fiel compañero. 

Se me inundan los ojos de pensarme sin el, Miller estuvo conmigo desde hace siete años y  fue el autor de muchas de mis alegrías, se imaginan como es que en un ser puede existir tanta nobleza y amor, nuestro amor siempre fue mutuo desde el primer día y sin importar cuantas veces lo regañara por sus torpes travesuras el seguía amándome...


En marzo comenzó un largo camino con Miller, saber que la displasia de cadera lo había dejado sin la posibilidad de volver a caminar nos cayó como balde de agua fría. 

Pero tomamos frente a la dura realidad y decidimos hacer todo lo que estuviera en nuestras manos para que pudiera “curarse”, eso incluía costosos exámenes, consultas, despertar en las madrugadas para atender su inconsolable llanto, ayudarlo a comer, tomar agua y si quería jugar sacar fuerza de no se donde para cargar 45kg que parecían una nada al ver su emoción de correr con ayuda para alcanzar su pelota. 


La enfermedad terminó rebasando a Miller, a sus ganas de jugar, de hacer un esfuerzo por pararse, de tirarse panza arriba para que lo acariciarás.  

Después de cuarto largos meses viviendo cara a cara la dura realidad de saber que nunca volvería a ser aquel perro que disfrutaba correr y jugar con su cuerda, sabiendo que su calidad de vida empeoraba con los días, tome la decisión más difícil; aquella que estuve evitando por meses... 


Y mira que si de perdidas se trata vaya que tengo experiencia, y aún estando ya curtida es inevitable doblegarse...


Una mañana del Sábado 25 de julio del 2020 a las 9:30, mis ojos ya no fueron correspondidos por los suyos, mis lágrimas rodaron en automático pues se había ido mi Millersito. Lloré, llore muchísimo como una niña chiquita sin consuelo.

_____________________________________________________________



Miller: 


Espero algún día volverte a encontrar, con todo el dolor de mi corazón te deje partir sabiendo que ya no sufrirías más, que no haya ni un cachito de duda lo mucho que te amamos y lo feliz que nos hiciste, al llegar a casa sigo esperando que me recibas como solías hacerlo al asomar tu cabeza por el pasillo. 

Es duro despedirse de quien te acompaño por muchos años, me enseñaste lo bueno de la vida, y nos diste tú amor sin importar nada , acá tu casita esta sola y mis ojos te buscan. 


 Liberarte del sufrimiento fue mi mayor acto de amor. Mis lágrimas son de tristeza por la pérdida de tu amor y compañía.


Extrañaré tú mirada que sin decirme nada, me lo decía todo. Y atesoraré en mi alma esa mirada tuya, que hacía llenar mi corazón. 


Agradecida estoy por los buenos tiempos compartidos, por las incontables sonrisas que provocaste en mí, las breves pláticas sin respuesta y lo mucho que llenaste de amor nuestras vidas.  


Fuiste muy valiente. 


Miller te amé y te amare para siempre. 

Te  extrañaré cada día de mi vida.








«¿Es posible que la Providencia me haya unido a ti 
para echarte de menos eternamente?»






miércoles, 7 de agosto de 2019

"L a s o l e d a d "




Después de varios meses de ausentarme por acá, regreso... con el corazón más tranquilo y el alma llena de amor, amor propio.


Les cuento que el año pasado aún me negaba a la idea de tener que pasar mi cumpleaños “sola” y lo pongo entre comillas porque realmente no estaba sola, tenia a mis hermanas, a mi mamá y a unos pocos buenos amigos con quien festejar.

Así que una semana antes tome la apresurada decisión de irme de Monterrey, me negaba a estar en la misma ciudad con la persona que había terminado una relación. Así que para que mi plan funcionara tenía que buscar a alguien con la misma vibración que yo, alguien que estuviera decidida a ir por un poco de aventura, que entendiera mi deseo de querer estar lejos festejando mi cuarto de siglo. La afortunada, mi mamá. Tome mis cosas y me fui a la playa buscando un poco de tranquilidad... ah y mojitos. Y así es como termine festejando mi cuarto de siglo, no hay nada mejor que despertar al mediodía, bajar al lobby a desayunar para después ir a tirarte a la playa, ver el sol caer y finalizar con una cena en compañía de una de las personas a quien más amo.
Pero hoy, hoy me siento más tranquila, con la firme idea de querer mantenerme soltera y no solo entablar una relación “para no estar sola” .
Porque realmente nunca lo he estado, de hecho ninguno de nosotros estamos solos, nos tenemos a nosotros mismos, es solo que lo olvidamos. Y si no nos hacemos a la idea de tener que aprender a vivir con uno mismo, andamos vagando por la vida creyendo que necesitamos de alguien para ser felices.
Desde que comenzó el año no he podido sacar de mi mente la idea de querer pasar mi próximo cumpleaños soltera y aquí me tienen escribiendo unas cuantas lineas mientras mi perrita Morgan me pide un poco de atención. 
Retomando el tema, he disfrutado mucho mi “soledad”, me siento plena pues he logrado cosas que veía muy lejos venir y estoy feliz por ello.

Las relaciones no son algo que deberíamos de tomarnos a la ligera, pues compartes muchísimo más que algo físico con otra persona. Al final si esa persona no era la indicada, se lleva consigo metas y sueños compartidos y aveces hasta un cachito de alma.
Las relaciones “tóxicas” están a la orden del día, la gente está necesitada de amor y forza relaciones que terminan siendo un desgaste emocional.



Creo que siempre es oportuno tomarse un tiempo consigo mismo, la soledad es necesaria, sin ella, no nos daríamos cuenta de lo que en realidad queremos o nos hace falta. Las personas deberíamos aceptar estar solteras por que es cuando se aprende sobre uno mismo.
Después cuando tengamos una relación seremos más fuertes y tendremos un poco más de auto-conciencia, amor propio y los demás ingredientes para una relación saludable.




“Cuando empiezas a amarte entiendes el tipo de amor que te mereces. “

sábado, 1 de septiembre de 2018

Mi primer "post".


He de confesar que llevo cerca de un año tratando de abrir un Blog, y por fin me arme de valor y aquí estoy...

Todo comenzó desde el día en que papá partió, dejando en mi tanto dolor que la única manera de sacarlo fue escribiendo. 

Escribía a ratos y a cualquier hora del día donde me tomara la inspiración, en la parada del camión, sentada en algún bar, a mitad de clase, inclusive en las madrugadas cuando su recuerdo era tan fuerte que no me dejaba dormir.
Así que aquí estoy, compartiendo uno de los muchos textos que escribí a lo largo de un año y esperando toque un cachito de su alma.

Mi primer "Post" va por y en memoria de mi papá. 

____________________________________________________________________


"Perder a mi padre ha sido de las cosas más fuertes y dolorosas que me han pasado, uno no idealiza el dolor y la reacción que tendrás ante un hecho así. Alguna vez llegue a pensar que cuando Dios decidiera llevárselo yo sería más mayor, que tendría alrededor de unos treinta años y que la madurez de mi edad me haría afrontarlo y aceptarlo con mayor facilidad, pero no fue así, la vida tiene situaciones, personas y experiencias preparadas para nosotros. La vida, el destino o Dios decidió que papá tenia que partir, dejándonos dolor, ausencia y confusión. A mis veintidós años estaba experimentando lo que era perder a un padre, a mis veintidós años la vida decidió darme una bofetada, misma que me hizo despertar de un porrazo, fue justo en eso momento en que por fin entendía la vida y lo que antes creía saber de ella no eran mas que cuentos sin sentido que me había hecho en la mente. Ahora se que la muerte viaja muy cerquita de nosotros y que no es seguro que todos lleguemos a viejos, ahora más que nunca siento a la vida más palpable, más real."
Written 18 julio 2016 - 2:44 am








Tu sonrisa en mi mente.


CARTA A MILLER

C reo que la segunda cosa más dolorosa después de perder a un ser querido, es perder a tú mascota... tu fiel compañero.  Se me inundan los o...